Renacimiento y Barroco en un soneto. Mitos

Hades y Perséfone.   
Miriam Martínez Aguado 1Bach B
Allí venía corriendo  su amante,
Tan feliz que parecía enamorada,
La mismísima Atenea dorada.
Como el bosque,  se veía avasallante


El oscuro inframundo fue su parte,
Oscuro era su carro, remolcado
por caballos  oscuros, y sentado
en trono oscuro la justicia imparte.


Solo quien compagina infierno y tierra.
La separa con llantos en invierno,
El amor es a veces una guerra.


En otoño regresa la posguerra.
Ese es el trato, su casa el averno,
A su madre, Perséfone se aferra.

Comentarios

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

Mi mito favorito; mito chama sobre el día y la noche

Mi mito favorito: La fundación de Atenas

Mi mito favorito: Sköl y Hati